Personal Trainer

Esta historia llegó por mail, Gracias D!!!
Esperamos que la disfruten tanto como nosotras:

Eran las 4 de la tarde y volvíamos de pasar un par de horas en el gimnasio. Fuimos a tu casa a tomar unos mates, pero mientras me ponía a prepar las cosas, me dijiste que te de unos minutos para darte una ducha.
Por dentro pensaba en que bien te quedaba esa calza negra, de cómo se te marcaba la tanguita, de esa cola bien redondita y firme. Ni hablar del top blanco que tenías, que contiene esas dos hermosas tetas que tenés. Mi cabeza iba a explotar cuando de pronto me di cuenta de que estaba completamente excitado y con mi pene formando una linda carpita.
Entonces decidí actuar. Me acerque a la puerta del baño, golpeé y pregunté si se podía. Tuve una respuesta afirmativa y pasé, pero aun estabas vestida, reclinada sobre la bañera abriendo la canilla de la ducha. Y ahí estaba frente a mí ese culito hermoso que tenés. Sentía cómo me llamaba y no me pude controlar.
Te agarré de la cintura y te metí conmigo en la ducha, como el agua aun estaba fría, sentí como tus pezones se pusieron muy rígidos (aunque en ese momento no sabia si era por el agua o por la excitación). Te levante el top y los tenia frente a mi. Los empecé a besar y acariciar con mi lengua, a aprisionar con mis labios y mis dientes y cuando sentiste la presión de ellos pusiste tus manos en mi cabeza. Yo pensaba que me ibas a sacar de los pelos, pero en vez de eso, entrelazabas tus dedos en mi pelo y me susurrabas “porque tardaste tanto, tonto..” lo que me termino de volver loco..!!
Me sacaste la remera mientras el agua de la ducha estaba con la temperatura justa. Te di vuelta y apoyaste tus manos sobre la cerámica. Yo me arrodillé y te empecé a bajar el pantalón junto con la tanga que tenias puesta y te empecé a morder el culo. Te agarraba de la cintura mientras me perdía entre tus nalgas bien firmes, luego te puse frente a mi, pasé una pierna sobre mi hombro y te empecé a devorar la concha con mis labios y lengua, te aprisionaba el clítoris con mis labios y tiraba de el ó jugueteaba con el con mi lengua y lo acariciaba, vos me hacías fuerza metiendo me mas dentro tuyo..!!
Luego me hiciste acostar en la bañadera y luchabas por sacarme el jogging que se había vuelto más pesado por el agua, cuando lo conseguiste, me senté y vos te pusiste en cuatro acercando tu cara a mi pene, que estaba muy firme a causa de tanta excitación. Me lo empezaste a acariciar con tu lengua, recorriéndolo por alrededor. Lo lamías a lo largo y cuando llegabas a la cabeza, me lo apretabas con tus labios, recorriendo toda su dimensión con ellos, lo que me volvía loco. Yo corría el pelo mojado de tu cara y observaba con placer como te tragabas todo mi pene y me mirabas con los ojos bien brillante.
Estoy que exploto y te levanto apoyándote de frente a la pared, con todo tu culo a mi disposición. Primero me acerco y te empiezo a besar el cuello y subo por el hasta llegar a tus orejas. Mientras tanto lentamente introduzco mi dedo dentro de tu culo para luego no lastimarte, y vos en vez de sacarlo, hacés mas fuerza. Te voy besando y mordiendo el hombro, con mi mando libre apretando tu pecho y aprisionando tu pezón entre mis dedos, tironeando de él con delicadeza, mientras sigo jugueteando con mi otro dedo dentro tuyo vos me agarras mi pene y me lo vas llevando atrás tuyo...
Entonces saco mi dedo y abriéndote bien la cola, te voy penetrando lentamente, veo como apretás tus labios a medida que voy entrando, exclamando cuando sentiste que estaba por completo adentro. Comencé a penetrarte una y otra vez, mi pene se pone más y más firme, cada vez con más fuerza, cada vez más y más rápido. Te empezás a arquear. Me pedís que no pare por favor que no me detenga, cuando de pronto empezás a gemir y a gritar. Con tu mano me agarrás la cabeza. Tus gritos suben en fuerza haciéndome excitar más, y cuando vos estabas en tu momento de clímax, mi pene empezó a llenar tu interior con toda mi leche caliente, sintiendo como rebalza de tu interior, terminando los dos hechos uno bajo el agua.
Luego nos recostamos un momento en la bañera, los dos abrazados pero jadeantes después de semejante momento, para recuperar algo de aliento.
Me levanto y te ayudo a salir de la bañera. Agarrás un toallon para secarte, pero me pongo frente a vos, saco la toalla de tus manos y la dejo sobre la mesada del baño. Te siento sobre ella y te abro las piernas, diciéndote que no quería que tu conchita se ponga celosa. Entonces vos mirás hacia abajo y ves que mi pene está nuevamente erecto. Con tus manos lo agarrás y te acaricias con él. Yo te agarro por la cola, haciéndote sentar un poco sobre la mesada y me abrazás con tus piernas atrayéndome a tu cuerpo. A medida que me acercaba sentía como me deslizaba dentro tuyo, me reconfortaba sentir el calor de tu pasión. Te empecé a morder los pezones, te apretaba las tetas haciéndolos salir más para afuera victimas de mis labios y dientes. Me separo un poco de vos para que puedas ver como entra y sale. Te empiezo a penetrar más fuerte, haciéndote saltar las tetas para todos lados. Vos te agarras de la mesada con las manos y yo con las mias te las sujeto firmemente, y de pronto siento como mi pene se pone más firme, haciendo resaltar sus vasos sanguíneos, que aumentaban su presion como un volcán en erupción dentro tuyo, haciendo saltar de tus labios gritos de placer y pasión..!!
Saco mi pene todo cubierto aun de leche, y te hago arrodillar. Acerco tu cara y hago que me lo limpies con tu boca, sintiendo como lo recorres con tus labios y lo acaricias con tu lengua nuevamente empecé a acabar pero esta vez dentro de tu boca, con una mano me apoyaba en la mesada y con la otra sostenía tu cabeza, pensando que al sentir como fluía la leche por tu boca, la retirarías, pero gratamente sentí como me la chupabas mas fuerte....
Y cuando sentiste que ya se estaba relajando, te paraste limpiándote el semen que chorreaba por los labios y me diste un beso.